(Into the wild)
Dices que debería darme un respiro mientras yo pienso que el único respiro que quiero es uno eterno en el que no tenga necesidad de volver al agobio. Pienso en aquella noche en la que vi por primera vez Into the wild y se me clavó la libertad en las costillas. Necesito tierra en las uñas, arañazos en las rodillas, la sal del mar pegada a mi pelo, dolor en la nariz por respirar tan alto. Quiero llamar hogar a un cúmulo de montañas y matorrales, a un conjunto de árboles que dejen de ser eso, árboles, para convertirse en mi pequeño bosque. Tienes razón, necesito un respiro. Y liberarme.